La giardiasis es una enfermedad parasitaria, causada por Giardia lamblia, protozoo parásito del intestino delgado, que puede llegar a ocasionar importantes trastornos, principalmente en animales jóvenes e individuos debilitados inmunológicamente. Se considera una zoonosis potencial, lo que significa que, aunque sea poco frecuente, puede llegar a transmitirse del animal al hombre. Es un problema muy frecuente en colectividades como criaderos o protectoras.
Cuando un animal se infecta el síntoma principal que desarrolla es una diarrea que se suele acompañar de pérdida de apetito y de peso según la duración del cuadro, así como vómitos y dolor abdominal.
La vía de transmisión es oro-fecal, lo que quiere decir que el contagio se inicia cuando nuestra mascota ingiere directamente heces, comida o agua contaminadas con quistes de Giardia, que son la forma infectante. Es muy frecuente que los perros desarrollen un cuadro de giardiasis al beber de aguas encharcadas tras días muy lluviosos. El principal problema de cara a su eliminación es la gran resistencia ambiental que tienen estos quistes por lo que resulta de vital importancia de cara a su prevención la limpieza y desinfección del entorno del animal. Para ello, lo ideal sería utilizar hipoclorito de sodio (lejía).
Su diagnóstico es vital pues en los últimos años ha aumentado su frecuencia de aparición, siendo España el tercer país europeo con más casos. Existen diferentes técnicas de diagnóstico empleándose en ambos casos una muestra de heces:
- Análisis coprológico: permite observar al microscopio las formas parasitarias.
- L.I.S.A.: detecta el antígeno de Giardia en las heces.
El tratamiento de elección frente a la Giardia es el febendazol siendo fundamental realizar SIEMPRE un control post-tratamiento para verificar su eficacia, pues en muchas ocasiones, aunque desparezca la sintomatología clínica el animal sigue siendo infectante (infección persistente) y puede contagiar a otros individuos.
